martes, 14 de septiembre de 2010

Cambios: afrontarlos o aterrarse

Martes 6 de julio de 2010

Algo cambia dentro de uno mismo. ¿O sea tal vez algo de fuera, lo que ha mutado? ¿O es que es que algún cambio exterior ha producido otro cambio, éste último dentro del individuo?

«Por ejemplo, en mis manos hay algo nuevo, cierta manera de coger la pipa o el tenedor. O es el tenedor el que ahora tiene cierta manera de hacerse coger, no sé» (Jean-Paul Sartre, La náusea)


«Algo me ha sucedido, no puedo seguir dudándolo. Vino como una enfermedad, (...)»
(Jean-Paul Sartre, La náusea)

Los cambios suceden, de una forma u otra. Yo siempre digo que es que 'algo' que has vivido, que has leído, que alguien ha compartido contigo. Algo que te da una nueva idea. O cambia una anteriormente concebida.
Por eso a veces se tiene miedo a vivir, quiero decir a vivir la vida. Porqué temes que algo que hagas te vaya a cambiar. Temes ese cambio por ser desconocido. Porqué puede no gustarle a la persona que ahora mismo eres. Porqué lo conocido da estabilidad, y la estabilidad implica la inexistencia de cambios (Un mundo feliz, de Aldous Huxley). Tenemos miedo de que ese cambio no nos guste o nos conduzca a perder algo o alguien (una amistad, no se puede poseer ni perder a ninguna persona, a nadie).

No hay comentarios:

Publicar un comentario